<Versión 0.8>
Escrito a lápiz
Usted pensará que malgasto mi tiempo.

10 junio 2006

"Rumores de guerra" Once lecciones de guerra


Tras unos días un tanto vertiginosos he decidido ponerle remedio mediante terapia de choque. He visto por quinta vez “Rumores de guerra”, un documental cuyo título original en realidad es “The fog or war". Eleven lessons from the life of Robert S. McNamara”. El que fuera Secretario de Defensa durante siete años (que abarcaron los mandatos demócratas de John F. Kennedy y gran parte del de Lyndon B. Johnson, que terminaría destituyéndole) a sus 85 años hace un repaso a su historia a través de una entrevista concedida al director Errol Morris. Pero tranquilos, se centra en la parte militar, he ahí su gran interés.

Cuando Robert S. McNamara era un pipiolo, consiguió un puesto de profesor asociado en la Universidad de Hardvard donde pasó a formar parte de la oficina de Control Estadístico de las Fuerzas Armadas durante tres años. Entre otras proezas elaboró un informe diciendo que los ataques del general LeMay (que comparte con Johnson el título al más agraviado en la entrevista) eran ineficaces. Lo que en gran medida supuso que LeMay hiciera descender de 23.000 pies a 5.000 sus B-29 y que provocara la masacre de Tokio (130 km2 de Tokio fueron destruidos porque las construcciones eran de madera).
"Todo mando militar honesto consigo mismo o con las personas a las que se dirija reconocerá que ha cometido errores al emplear la fuerza. Que ha matado personas innecesariamente de sus unidades o de otras por errores de análisis. A cientos, miles o incluso a cientos de miles pero sin destruir países. No hay que cometer errores dos veces sino aprender de los errores. Pero todos lo hacemos. Cometemos el mismo error hasta tres veces, pero con suerte ni cuatro ni cinco. No hay tiempo para rectificar con las armas nucleares. Un error y destruyes un país".
Tras su paso por la Ford, John F. Kennedy le ofreció la Secretaría de Defensa donde vivió la crisis de los misiles de Cuba, la “caliente” Guerra Fría y la guerra del Vietnam. El documental va de eso: un entrañable abuelito contando sus batallitas de guerra. Nada nuevo bajo el sol si no fuera porque el abuelito es R. McNamara, Secretario de Defensa de la mayor potencia nuclear del mundo, que además va y resulta que protagoniza un documental titulado “The fog of war” (“La nebulosa de la guerra”, que no “Rumores de guerra”); según McNamara, “una frase que representa que la guerra es tan compleja que la mente humana no la puede comprender en todas sus variables”. Y sin embargo, o precisamente por ello, contrario a la proliferación nuclear, casi pacifista. Mi electroencefalograma no alcanza la actividad necesaria para comprenderlo.

A lo largo de la entrevista McNamara hace un repaso por los conflictos que vivió de cerca, cuánto de cerca estuvo de ellos, la influencia de sus decisiones y las decisiones que los que le rodeaban tomaron sobre las suyas. Porque si algo queda claro es que él servía a su presidente y en ocasiones éste se equivocó (Johnson) lo que le convierte en el responsable de la guerra, porque “si Kennedy hubiera estado vivo hubiera sido diferente”. Acompañando a sus palabras, además de imágenes, se reproducen discursos y conversaciones telefónicas que permiten ver la evolución de los mensajes lanzados por el Gobierno norteamericano durante las intervenciones en Vietnam y que no siempre coinciden con sus palabras.



La narración se estructura en torno a 11 lecciones extraídas de sus palabras. No tienen desperdicio:

Lección 1: Tener empatía con el enemigo

Lección 2: Ser racionales no nos va a salvar

Lección 3: hay algo más allá de uno mismo
Responsabilidad, valores, moral. Pero sobre todo, estadística.

Lección 4: Maximizar la eficacia

Lección 5: La proporcionalidad debería ser una máxima en la guerra

¿Es necesario calcinar a 100.000 personas para ganar una guerra? LeMay diría que sí. Y le increparía a McNamara si acaso creía mejor dejar que masacraran a sus soldados en las playas de Japón como sucedió en Normandía.
“La proporcionalidad debería ser una máxima en la guerra. Matar al 50%, al 90 % de la población de 67 ciudades es desproporcionado para algunas personas teniendo en cuenta los objetivos”.

“Lo que es censurable es que el ser humano ni antes ni ahora ha entendido cuales son las reglas de la guerra LeMay dijo: si hubiéramos perdido la guerra nos hubieran acusado de crímenes de guerra. Y tenía razón. Él se comportó como un criminal de guerra y yo también".
Lección 6: Buscar información

Lección 7: Muchas veces vemos lo que queremos ver y no lo que es

Los vietnamitas creyeron que queríamos colonizarlos, y nosotros que nos atacaban.

Lección 8: Estar preparado para reconsiderar ideas

Si no podemos convencer a países de ideas similares a las nuestras, deberíamos reconsiderar nuestra postura.

Lección 9: A veces el fin justifica los medios

Lección 10: Nunca digas nunca jamás ( y nunca respondas a lo que te pregunten.)

Lección 11: No se puede cambiar la naturaleza humana

“Matamos a gente innecesariamente”. “Las guerras no se pueden erradicar”.

Epílogo
“No voy a decir nada más, estas peguntas me traen sin duda complicaciones. Mucha gente no entiende la guerra, ni me entiende a mí. Para muchos soy un hijo de puta”. ¿Se siente responsable de la guerra? “No quiero seguir con esto, sólo suscitaré más polémica. No quiero decir nada más de Vietnam”.
Qué, ¿Belicista o pacifista? Pues eso no es todo porque esas 11 lecciones fueron establecidas por el malvado Errol Morris, a lo que McNamara, como queriendo arreglarlo, añade ahora (en los extras del DVD que por supuesto me he comprado) 10 lecciones extra (únicamente redactadas) de las que les ofrezco un breve ejemplo (no voy a comisión, pero son muy largas, así que si quieren las diez se lo compran):

1. La raza humana no acabará con la guerra este siglo, pero sí que podrá reducir su brutalidad y el número de víctimas si se adhiere a los principios de una “Guerra justa”, en especial al principio de “proporcionalidad”.

8. La guerra es un medio ineficaz para resolver los problemas entre las naciones y las sanciones económicas casi nunca son efectivas. Por consiguiente deberíamos establecer un sistema de Justicia centrado en el Tribunal Internacional, a quien Estados Unidos se niega a apoyar, que sería el encargado de juzgar los crímenes contra la humanidad

10. Uno de los mayores peligros a los que nos enfrentamos hoy en día es el riesgo de que los terroristas consigan armas de destrucción masiva como resultado de la crisis del Tratado de No Proliferación Nuclear. Nosotros, Estados Unidos, estamos favoreciendo esa crisis.

1 hora 40 minutos. Apasionantes.

aportaciones:
Poco a poco vas consiguiendo que me guste un poco más la política y que me apasione vivir en la sociedad (democrática) en la cual vivimos.
Gracias
 
Oiga, por nosotros mucho mejor si sigue contándonos cositas de estas. Es como más bonito que mucho de lo que se puede leer por ahí.
 
Y aquí cabe decir aquello de que hay gustos para todo
 
Perdón, pero se trata de mi nick. No conozco a nadie que escribe en este blog, simplemente porque pasaba por aquí y, precisamente, porque me interesa loo que he encontrado lo visitaré más veces. A mi, por ejemplo, me encantan las mariposas, la literatura y divagar sin parar (no soy Mensa, por cierto, Lydia, podrías tocar algún día el tema de los Mensa. Muy interesante). Cada cual tiene sus intereses, que son al fin y al cabo pasatiempos para soportar la existencia.

Besos y buen rollito. Me presento: soy anónima.
 
Hombre, esto es como todo, si te dicen cosas bonitas (gracias "anonymous") lo normal suele ser que la no-identidad dé lo mismo. Si te increpan suele gustarte un interlocutor algo más físico que el 'anonimo' a quién enfrentarte. El pseudónimo si se mantiene una constante, estaría también bien, supongo.
 
Acabo de verlo en canal plus. Está bien y empatizas con el viejecito.
 
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